En la producción de productos horneados, la gestión de la higiene es fundamental, y la ducha de aire es uno de los dispositivos clave para garantizar un entorno de producción limpio.flujo de aire filtrado para eliminar el polvo y los microorganismos del personal o los materialesA continuación se presentan los principales requisitos técnicos e higiénicos para las duchas de aire en las fábricas de panificación de alimentos.
Requisitos técnicos
Filtración de aire de alta eficiencia: Las duchas de aire deben estar equipadas con filtros HEPA (High-Efficiency Particulate Air) con una eficiencia de filtración de al menos el 99,97% para eliminar eficazmente las partículas y microbios en el aire.
Control del flujo de aire: La velocidad del flujo de aire de la boquilla debe mantenerse en 20-25 m/s para garantizar una descontaminación eficaz sin causar molestias.
Sistema automático de sensores: Los sensores infrarrojos o de microondas permiten el funcionamiento sin contacto, minimizando la contaminación cruzada.
Estándares materiales: Las paredes interiores deben estar hechas de acero inoxidable 304 o de materiales recubiertos con antibacteriano para una fácil limpieza y resistencia a la corrosión.
Configuración del temporizador: La duración del soplado se establece normalmente en 10-20 segundos para garantizar una descontaminación completa.
Requisitos de higiene
Limpieza y desinfección periódicas: El interior debe limpiarse diariamente y limpiarse con desinfectantes de calidad alimentaria para evitar el crecimiento de microbios.
Mantenimiento del filtro: Los filtros HEPA deben inspeccionarse cada 3-6 meses y sustituirse cuando sea necesario para mantener la eficiencia.
Formación del personal: Los empleados deben usar trajes de sala limpia y recibir una formación adecuada para evitar un funcionamiento incorrecto.
Control del medio ambiente: Se deben realizar ensayos regulares de limpieza del aire para garantizar el cumplimiento de las normas GMP o HACCP.
Al cumplir con estrictas prácticas técnicas e higiénicas, las duchas de aire pueden salvaguardar eficazmente la higiene y la seguridad de las fábricas de horneado de alimentos, mejorando la calidad del producto.