2025-07-25
Las salas blancas son entornos especializados diseñados para controlar la contaminación mediante la regulación de partículas en el aire, la temperatura, la humedad y la presión. Son cruciales en industrias donde incluso los contaminantes microscópicos pueden comprometer la calidad del producto, la seguridad o la integridad de la investigación.
En este blog, exploraremos los diferentes tipos de salas blancas según las normas de clasificación, los sistemas de flujo de aire, las aplicaciones industriales y los diseños estructurales.
La Organización Internacional de Normalización (ISO) define las clases de salas blancas en ISO 14644-1, que especifica el recuento máximo de partículas permitido por metro cúbico.
Clase ISO | Partículas máximas (≥0,5µm por m³) | Aplicaciones típicas |
ISO 1 | ≤12 | Fabricación de semiconductores, nanotecnología |
ISO 3 | ≤1.020 | Microelectrónica, óptica avanzada |
ISO 5 | ≤3.520 | Llenado estéril farmacéutico, biotecnología |
ISO 7 | ≤352.000 | Fabricación de dispositivos médicos, farmacias de preparación |
ISO 8 | ≤3.520.000 | Envasado, procesamiento de alimentos, algunos trabajos de laboratorio |
ISO 9 | ≤35.200.000 | Procesos industriales básicos (menos estrictos) |
Conclusión clave: Cuanto menor sea el número de clase ISO, más estricto será el control de la contaminación requerido.
El aire se mueve en una dirección única y constante (ya sea vertical u horizontal).
Filtros HEPA/ULPA aseguran un aire ultralimpio.
Lo mejor para: Fabricación de semiconductores, llenado estéril de medicamentos y montaje de precisión.
El aire circula en múltiples direcciones pero aún se filtra.
Lo mejor para: Aplicaciones menos críticas como laboratorios de envasado o pruebas.
Combina estaciones de trabajo de flujo laminar dentro de una sala de flujo turbulento.
Lo mejor para: Instalaciones que necesitan limpieza general y zonas ultralimpias.
Deben seguir las GMP (Buenas Prácticas de Fabricación).
Se utilizan para la producción de medicamentos estériles, el desarrollo de vacunas y la terapia celular.
Requieren estándares ISO 1-5 debido a la extrema sensibilidad al polvo.
Se utilizan en fabricación de microchips, nanotecnología y fabricación de pantallas.
Necesarias para el montaje de satélites, componentes de naves espaciales y sistemas ópticos.
A menudo cuentan con protección ESD (descarga electrostática).
Se utilizan en quirófanos, farmacias de preparación y producción de dispositivos médicos.
Deben cumplir con las normas FDA e ISO 13485.
Se encuentran en universidades, laboratorios de nanotecnología e investigación en ciencia de materiales.
A menudo son modulares para mayor flexibilidad.
Estructuras permanentes con paredes sólidas (paneles de acero, aluminio o acrílico).
Lo mejor para: Aplicaciones a largo plazo y de alta limpieza.
Hechas de cortinas de vinilo o PVC con un marco rígido.
Lo mejor para: Configuraciones temporales o económicas.
Prefabricadas, fáciles de expandir o reconfigurar.
Lo mejor para: Empresas en crecimiento o necesidades de producción cambiantes.
El tipo de sala blanca que necesita depende de:
✔ Requisitos de la industria (farmacéutica, electrónica, etc.)
✔ Nivel de limpieza (clase ISO)
✔ Diseño del flujo de aire (laminar vs. turbulento)
✔ Necesidades estructurales (paredes duras, paredes blandas, modular)
Ya sea que esté fabricando microchips, produciendo vacunas o realizando investigaciones avanzadas, seleccionar la sala blanca adecuada garantiza la calidad, el cumplimiento y la eficiencia.
¿Necesita ayuda para decidir? ¡Consulte a un especialista en salas blancas para adaptar una solución a sus necesidades!
¿Le gustaría profundizar en algún tipo específico de sala blanca? ¡Hágamelo saber en los comentarios!